Mírame y dispárate de Alessandra Neymar

Advertencia, este post puede ser ofensivo, e incluso dañino. No sé si es necesario decir que este es un blog de reseñas completamente subjetivo y tan sólo basándose en la opinión de su redactora. Así que antes de poner morritos y acusarme de ser una mala lectora, siento la necesidad de recordar que hay una bonita X en la esquina superior derecha. Muchas gracias.

Ha ganado un premio, dijeron. Tiene que ser bueno si ha ganado un premio, dijeron. Hay mucha acción y un romance nunca visto, dijeron. Hay una protagonista badass, dijeron. Voy a leerlo, dije yo.

Cruel, cruel error.

Kathia Carusso es rica, guapa y rica y guapa. Cristianno Gabanna –si es que ya desde la sinopsis, apuntaba maneras- es rico, guapo y rico y guapo. Y se odian. O puede que no, porque son ricos y guapos. Y pasan cosas. Y cosas “chungas”. Y hay mafiosos. Y eso.

Si os soy sincera, no fui capaz de acabarme la novela. Desistí en la página 384 y eso que me había pasado casi 50 en una agonía lectora, saltándome párrafos, echando hojeadas, rezando para que todo acabara pronto. Y al final, lo cerré y lo devolví a su legítima dueña –obviamente, un libro así NO podía ser mío y estar entre mis estanterías-. Ay, Dios, ¿por qué no habría continuado con After, un libro mucho mejor escrito y mucho menos doloroso a los ojos?

Mírame y dispara parece ser el resultado de una rápida lectura de Tres Metros Sobre el Cielo, aderezado con todo lo peor que se podía coger de la literatura juvenil y condimentado con una pizca del estilo de Blue Jeans y todo el pastelosismo y edulcoramiento habido y por haber en el mundo.

Supuestamente, el libro se desarrolla en Roma, pero de Roma no vemos ni un pelo. El libro se desarrolla en coches de lujo –siempre, siempre un Bugatti o un Rolls Royce con tapicería de cuero-, mansiones carisísimas y hoteles de 10 estrellas. No habría costado nada leer por encima una guía de viajes, para documentar un poco la novela y darle un telón de fondo creíble, digo yo. La acción podría transcurrir en cualquier otro sitio que habría dado lo mismo. Yo creo que se escogió Roma por la bromita de la “mafia italiana” y por el ya mencionado fenómeno Moccia.

Como ya digo, se divide en dos partes: la primera que es básicamente un popurrí de marcas tan caras que te llevas las manos a la cabeza y la segunda es la parte de la acción en la que, oye, la marca de la ropa cada extra es imprescindible y es muy importante mencionarla en cada escena, no vaya a ser que con las 239890 veces que se ha mencionado, al lector se le olvide que está leyendo un libro donde todo el mundo parece haber salido de un anuncio de Loewe con bolsos en la cabeza incluidos.

Y esa es otra, TODO EL ELENCO DE PERSONAJES son unos cacho supermodelos que no tienen ni un gramo de grasa, ni una peca, ni un grano, ni una arruga, ni un diente torcido. ¿Los ricos nacen con un gen o algo? Pero si eso se compensase con unas personalidades y un carisma apabullantes, pero LOLno. En fin, he visto capítulos de Rasca y Pica más creíbles.

En cuanto al desarrollo del argumento, TODO se cimenta sobre unos grandes clichés. Todo parece haberse planeado sobre la marcha, escrito con prisas, improvisado.

¿Y queréis hablar del romance? Hablemos del romance.

“Le odio, pero es que está muy bueno.”

“La odio, pero es que le quiero echar tres polvos y me pone como una moto, pero me da un cosquilleo por dentro, pero yo soy un tío duro y todos los tíos duros hablamos así. Tío.”

WHAT? No, en serio, hay tantas cosas que me irritan y me exasperan y me dan ganas de tirarme por los pelos hasta quedarme con la cabeza brillante como una cacerola –see what I did there?-. Queridas autores de novelas juveniles, a ver cuándo nos enteraremos de que LA ATRACCIÓN FÍSICA NO ES AMOR. NO. LO. ES. No hay nada malo en sentirse atraído hacia alguien, pero os empañáis en convertir una reacción hormonal en EL MEJOR ROMANCE MEJOR CONTADO DE TODOS LOS TIEMPOS HABIDO Y POR HABER, y NO. Estoy deseando leer una novela en la que nadie vaya de puritano y nadie confunda “amar” con “querer follar”.

Logro desbloqueado, un gran aplauso a la fantástica Meg Rosoff y su Adiós de la Novia.

VEREDICTO:

Tendré que leer mucha, mucha, mucha literatura decente para quitarme este horror de la cabeza.